Enfoque empresarial: Sostenibilidad / Innovación / Competitividad

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Nos encontramos en el final de una era económico-social dominada por la economía basada en el petróleo y en transición hacia una economía de bajo consumo en carbono. Este modelo devorador de recursos energéticos no renovables comienza a generar crisis de precios en materias primas claves para la economía. El asiento de una relación Sostenible de la actividad económica con el entorno se basa en gran medida en la Innovación y, de forma más específica, en la Ecoinnovación como motor del enfoque del negocio en clave de sostenibilidad dado que asegura la Competitividad y un menor consumo de recursos, un mayor respeto al Medio Ambiente, el mantenimiento y/o la generación de puestos de trabajo, etc.

La Ecoinnovación ofrece a las actividades productivas:

Soluciones a las necesidades de conservación ambiental, en aspectos tales como: Cambio Climático, Naturaleza y Biodiversidad, Salud y Calidad de Vida y Gestión de los Recursos Naturales y los Residuos y, a su vez, proyecta oportunidades en materia de Competitividad al conjunto de actividades económicas por su relación con aspectos tan significativos como la estrategia de producto y su innovación, gestión de la excelencia, protagonismo, mejora continua y mejores compromisos con los “agentes” o “stake holders” (partes interesadas internas o externas del negocio).

Ahora bien, Innovación no es lo mismo que modernización/actualización. Innovar no consiste sólo en cambiar los materiales, las tecnologías utilizadas, etc. Las innovaciones suponen cambios pero no todos los cambios son innovaciones. Si actualizas tu empresa estarás alcanzando, en gran medida, la Ecoeficiencia pero no la Ecoinnovación.

La puesta en práctica de la Ecoeficiencia es sin duda una condición necesaria para minimizar el impacto ambiental pero es la Ecoinnovación la que supone la introducción de mejoras ambientales disruptivas (radicales) en los productos, las tecnologías o la organización empresarial, es decir, que va más allá de las mejoras contempladas por la Ecoeficiencia, dado que responde con mayor eficacia a las apremiantes exigencias del desarrollo sostenible al tiempo que ayuda a fomentar la Competitividad.

La RSE (Responsabilidad Social Empresarial) en el contexto del Desarrollo Sostenible:

La práctica de la RSE conlleva a la conciliación -desarrollo económico y conservación ambiental-, siendo este último aspecto el “motor” de la reflexión y de los planteamientos. En la medida en que se incorporan al planteamiento los aspectos sociales de la actividad, cobran paulatinamente una importancia relativa creciente, ya que incorpora un elemento que es fundamental para “convencer” a las organizaciones y a las personas de su alrededor, los “agentes” o “stake holders”, y mantener su competitividad.

En la medida en que este aspecto social de la actividad va cogiendo relevancia, la terminología utilizada evoluciona hasta quedar generalmente asumido el término RSC (Responsabilidad Social Corporativa) para referirse al planteamiento de un “proyecto de empresa sostenible” en su conjunto y RSE (Responsabilidad Social de la Empresa) para referirse a la práctica de la Sostenibilidad en las organizaciones. Utilizaremos indistintamente RSC y RSE.

La práctica de la RSE, vinculada a la de Ecoinnovación, presenta dos aspectos estrechamente ligados a la Competitividad:

Uno. Una herramienta más de los instrumentos de gestión de la empresa, que minora riesgos ambientales y mejora sus relaciones con el entorno y su imagen, entre otras prestaciones.

Dos. Pone de relevancia que la Ecoinnovación o la adopción y desarrollo de tecnologías y procesos apropiados ostentan una importante oportunidad en la diversificación y desarrollo de nuevos productos, al tiempo que supone una ventaja competitiva en el mercado. Es el caso, por ejemplo, del sector de la automoción, que pasa de “sufrir” las necesidades de gestión medioambiental de sus actividades, a contemplar la variable ambiental como uno más de los elementos estratégicos de su acceso al mercado.

Si además de los aspectos medioambientales le sumamos otros incluidos en la RSE, en un mercado sensibilizado de forma creciente ante los aspectos sociales de las actividades, la RSEcobra una importancia máxima y una oportunidad para impulsar Sostenibilidad / Innovación / Competitividad.

Algunas acciones específicas en el impulso de la Ecoeficiencia / Ecoinnovación:

Fundamentalmente, lo que se contempla es la convocatoria de proyectos, todo el tratamiento de subvenciones, europeas, estatales y canarios, y, en ciertos ámbitos, un ejemplo a valorar, el fomento de acuerdos voluntarios territoriales/sectoriales para alcanzar consensos en los objetivos, nos referimos: al desarrollo normativo como soporte de las iniciativas empresariales en implantación de tecnologías e infraestructuras ambientales, estimulación de recursos de capital riesgo para la apuesta de las tecnologías ambientales (cuando la materialización de la Ecoeficiencia / Ecoinnovación precisa de tecnología), establecimiento de criterios ambientales en la definición de ayudas administrativas y en la licitación de concursos públicos en cualquier área de la administración, listado de tecnologías limpias a empresas, etc.

Fomento de acuerdos voluntarios territoriales/sectoriales:

Para impulsar la Cultura de la Responsabilidad Social Medioambiental los 7 elementos de la Ecoeficiencia deben ser conocidos e interiorizados por la Sociedad y las Empresas, además, tener una actitud proactiva hacia la Ecoinnovación, es lo esencial, pero para tener IMPACTO, este quehacer tiene que ser dinamizado no sólo por las Instituciones públicas sino por una OLA DE ENERGÍA: Institucional, Empresarial y Ciudadana y para dar un salto en actitudes de Responsabilidad Social Medioambiental hemos de CREAR DESEOS en toda la Sociedad. Para ello, sería muy conveniente promover, un Acuerdo / Compromiso con la Sostenibilidad,para impulsar la Ecoeficiencia / Ecoinnovación y, en sentido amplio, la Ecología Industrial (*) y, como hemos de CREAR DESEOS, hemos de propiciar siempre que el potencial Programa de actividades de las Entidades adheridas lo visualice la Sociedad, dado que la RSE, ejemplo de Buenas prácticas empresariales, debe de ser mostrada a la Sociedad.

El Compromiso con la Sostenibilidad lo podríamos materializar no sólo en un Programa, compendio de los programas de las diferentes Entidades adheridas, Instituciones y empresas, sino en su estructura de apoyo, nos referimos a la incorporación del Tercer Sector, algunas de las Entidades adheridas a Sociedad Activa, la F.C. Medioambiental La Tirajala, por supuesto. Sociedad Activa perfectamente podría asumir el impulso de:

a) Visualización de los diferentes memorias de sostenibilidad, programas y objetivos de las Entidades Adheridas al Compromiso y el “Mapa de talentos” en Web y publicaciones; boletín electrónico, medios y otros recursos.

b) A valorar. La cesión del potencial logotipo de Compromiso con la Sostenibilidad para utilizarlo en sus comunicaciones, aparición en página Web en posición reservada, otros.

c) Realización de al menos una Jornada anual para compartir “Buenas prácticas empresariales” en materia de Ecoeficiencia / Ecoinnovación, con aquellas empresas que están trabajando en ella, impulso de la Ecología Industrial y otros temas de actualidad.

d) Gestiones de tipo comercial para ir incorporando poco a poco más empresas al Acuerdo/Compromiso con la Sostenibilidad.

e) Concursos (hay que crear deseos) y otras actividades.

Lo ideal sería que dicho Compromiso fuera impulsado por el Gobierno de Canarias en total sintonía con el Cabildo de Tenerife, otros en toda Canarias, Ayuntamientos, Grandes Empresas y Organizaciones varias.

Último mensaje: estamos seguros que un proyecto de estas características dinamizará a la Sociedad en actitudes de Responsabilidad Social Medioambiental individual y colectiva, dado que al adjudicarnos un Acuerdo/Compromiso tan relevante se inicia el cumplimiento de la exigencia social y política mayoritaria, en consecuencia, acelerará un proceso que parece ralentizarse y abrirá la puerta a cambios en la política medioambiental al aunar esfuerzos y aplicar soluciones, más numerosas y eficaces, a los principales desafíos Medioambientales.

(*) Cualquier empresa que desarrolle la Ecoeficiencia y que sea proactiva con la Ecoinnovación se le considera integrante en el tejido que la ECOLOGÍA INDUSTRIAL contempla.