En un mundo con contactos cada vez más estrechos entre ciudadanos, empresas, instituciones y asociaciones, las relaciones constituyen una dimensión clave, hemos de cuidar este aspecto tan esencial de manera constante y cuidada, para ello previamente hemos de visualizar los valores e intereses de unos y de otros y defenderlos adecuadamente.
Una política inteligente es mostrar nuestro Compromiso con la Sostenibilidad, ofrecer al mundo nuestro quehacer en esta materia tan esencial dado que atrae inversiones y turistas. Incluso mostrar nuestra solidaridad con los más desfavorecidos parece propio, lo adecuado.
En este marco, dado que en un mercado tan competitivo como el actual, la Sostenibilidad no sólo es un recurso para las empresas sino también para un territorio, los territorios también tienen que demostrar que son responsables medioambientalmente, no podemos olvidar que la SOSTENIBILIDAD en la competitividad es un criterio vital, la RSC y su difusión cogen fuerza.
Todo apunta que para tratar un proyecto de estas características un foro de diálogo es una prioridad, una política con valores y principios que responde a los anhelos, esperanzas, solidaridad e intereses de los ciudadanos. La superposición de criterios económicos, culturales, sociales, etc., es clave. Además, el faro de este quehacer sería descansar en consensos básicos y durar en el tiempo. Ello sólo es posible si sus pilares son sólidos, y la Sostenibilidad es el pilar más sólido y consensuado que tenemos en la actualidad. Otro pilar igualmente sólido y consensuado es la cooperación al desarrollo. La cooperación al desarrollo se basa en la solidaridad entre seres humanos y, en estos tiempos, tiene una dimensión en donde afloran los valores. A menudo, la Cooperación es una cuestión de vida o muerte y en estos tiempos mucho más, no debemos olvidarnos de esta cuestión.
Este sentir forma un quehacer que debe estar respaldado al máximo, ello exige un gran esfuerzo en la coordinación de las posiciones. No es fácil diseñar y llevar a cabo un proyecto de RSC y su difusión que conlleve una incubadora de proyectos medioambientales -Ecoincubadora- si no se dispone de la Cooperación necesaria, no sólo hay que ser imaginativos, audaces y ambiciosos, en este quehacer la Cooperación es el eje fundamental, encontrar o generar sinergias con instituciones, empresas, asociaciones, etc., es clave.