La colaboración es la salida

La sociedad de la que formamos parte tiene un carácter eminentemente interactivo, algo a lo que han contribuido las nuevas tecnologías y, sin lugar a dudas las redes sociales. Ese concepto de conectividad y pertenencia ha facilitado la aparición de nuevas entidades, nuevas formas de emprender negocios y nuevas fórmulas corporativas.

Precisamente ese último concepto ha dado un giro de 360º hacia un término más común de lo que parece, el consumo colaborativo. Individuos y colectivos que han apostado por compartir, prestar o alquilar, entre otras acciones, sus bienes, gastos e inmuebles. Todo ello supone un ahorro para el bolsillo y para el consumo energético.

La facilidad de pagos online que ofrece la red y la posibilidad de ofrecer contenidos a la distancia de un sólo click son algunas de las ventajas que ya muchas personas rentabilizan en Canarias. El tipo de actividades que engloban esta práctica abarcan sectores como la inmobiliaria, alquiler de coches, turismo, la compraventa de artículos, otros.

Un estudio reciente realizado por Avancar ha llegado a asegurar que la línea marcada hasta ahora por este tipo de consumo podría generar un ahorro de 900 euros anuales para cada residente. Datos especialmente llamativos para una alternativa que cada día gana más peso entre la ciudadanía.

Sin ir más lejos, el pasado 16 de enero se celebró el Día Internacional de la Colaboración, creado para poner de manifiesto la popularidad que han adquirido algunas prácticas como los espacios compartidos de trabajo o coworking.

Al respecto, según datos de Google Insights y Google Trends, España es el país donde más búsquedas se realizan de ese término que resume la unión de varias compañías bajo el mismo techo. Canarias ha sido uno de esos claros ejemplos, acogiendo empresas europeas que aprovechan los beneficios de trabajar a través de sus portátiles, disfrutando de un clima inigualable.

A ello hay que unir la posibilidad de compartir habilidades y generar proyectos conjuntando recursos e ideas para poder salir adelante en este período de crisis económica. Un paso adelante de las sociedades que se apuntan a la recurrida máxima "renovarse o morir".