Introducción

Consumir de una manera más consciente tiene que ver con un estilo de vida más compatible con un entorno ambiental más sano y con una manera de ganar calidad de vida. Este camino compatibiliza la placidez propia con la colectiva y facilita la prosperidad sin acaparar muchos recursos y sin contaminar el medioambiente.

Hablamos de consumir de una manera más responsable y, como hemos expresado, tenemos que empezar por cuestionarnos necesidades. Hemos de reducir el consumo, reciclar y reutilizar los objetos, intentar intercambiarlos antes que tirarlos, consumir productos locales, en cuanto a alimentación productos propios y mejor de temporada, reducir nuestro consumo de envases, usar más el transporte público, etc. Hay que entender este tipo de hábitos desde la ilusión, desde el placer y la posibilidad de mejora y no desde una visión de obligación. Para ello, hay que buscar qué es lo que motiva a cada uno, qué es lo que nos hace ilusión, lo que nos llama la atención. Hay que empezar por aquello que nos resulte fácil y placentero. Compartir con gente con las mismas inquietudes nos ayuda a avanzar.