Mejorar las tasas de reciclaje

Aportar las soluciones necesarias para gestionar los desechos:

Un porcentaje del material depositado en el contenedor amarillo, por ejemplo, es de rechazo y enviado a vertederos, al igual que la fracción resto. De las toneladas recibidas de envases ligeros depositados en el contenedor amarillo, la mayor parte son recicladas, pero no toda la recogida selectiva ya que algunos desechos que se depositan son residuos impropios, como son los juguetes, cintas de vídeo, balones de plástico...

Es un hecho que hay bastante material de rechazo que podría ser reciclado. Para ello, hemos de hacer hincapié en la necesidad de desarrollar infraestructuras que permitan aprovechar todos los recursos que están presentes en los residuos. Aportar las soluciones necesarias para gestionarlos de forma moderna y eficaz dado que equivale a asentar nuestro futuro ambiental.

 Con los datos por barrios: podemos mejorar las tasas de reciclaje.

Hace ya varios años que el porcentaje de residuos que se recicla, el que no va al vertedero, está bastante estancado. Con la puesta en marcha de diferentes contenedores, aceite, ropa..., con la recogida de materia orgánica y con concienciación ciudadana pensamos que se puede dar un impulso a las tasas de reciclaje. Hay mucho margen de mejora; se recogen toneladas de papel para reciclar al año, pero se estima que hay una cantidad considerable en el contenedor verde; se separan toneladas de vidrio pero otras tantas acaban en el contenedor de basura no reciclable; y en el caso de los envases, se recogen toneladas en su contenedor, el amarillo, pero otras tantas, bastantes, que no han sido debidamente separadas acaban en el contenedor de lo no reciclable.

¿Qué aporta el análisis de recogida barrio a barrio?

Nos parecería bien pesar los camiones al entrar y al salir de los barrios, así sabríamos qué recogemos y cuánto de cada cosa, en cada barrio. Esto nos permitiría cotejar las cifras de tipo y cantidad de residuos recogidos con otros parámetros. Por ejemplo, la recogida de residuos según la edad de los vecinos o según el consumo de agua, o comprobar si, por ejemplo, en un barrio con mucho comercio se recoge más cartón o más envases, etc.

¿Y qué se puede hacer después con esos datos comparados?

El objetivo que marca la ley estatal de residuos es llegar a reciclar al menos el 50% en 2020. Nosotros quisiéramos llegar a esos datos y a más, y si es posible. Los datos por barrios nos van a permitir, por ejemplo, hacer campañas de sensibilización por barrios, con objetivos específicos en cada caso, emplazar contenedores de manera más propia, cercana, etc. Si mejoramos barrio por barrio, podremos reciclar más.